martes, 11 de agosto de 2020
PRESENTACIÓN
RECURSOS DIGITALES
- Recursos online para profesores de Historia y Geografía:
- Para trabajar mapas
- Para hacer líneas de tiempo
- Para hacer mapas mudos
- Para hacer mapas
- Para crear comics sobre mitos y leyendas
- Para conocer las pirámides de Egipto en 3D
- Para conocer París en 3D
- Más mapas por la National Geographic
- París a lo largo de la historia: juego interactivo
- Para conocer estadísticas del planeta tierra en vivo
- Para hacer puzzles
- Para hacer caligrafías y otros. Recursos para primer ciclo. (primaria)
- Para trabajar nubes de palabras
- Nubes de palabras de gran diseño
- Matrices para flash cards y quizs
- Para puzzles y worksheets
- Para hacer mapas conceptuales
- Para mapas conceptuales imprimibles
- Para crear puzzles educativos
- Para imprimir calendarios
- Para imprimir calendarios escolares
- Para hacer pruebas y tests en línea
- Organizadores gráficos I
- Más organizadores gráficos II
- Para hacer rúbricas
- Recursos online para evaluación
- Muchas alternativas para todos los gustos
- Para crear infografías online
- Para infografías más pro
- Listado de actividades , dinámicas de grupos
- Para descargar tipografías generales
- Para descargar tipografías escolares para trabajar caligrafía
- Para reforzar el estudio personalizado
- Juegos interactivos para primer ciclo básico o cursos de primaria
- Edublogs para profesores
HERRAMIENTAS DIGITALES
Ø Herramientas para el trabajo colaborativo
Es un servicio
disponible desde la cuenta de google, que permite el almacenamiento de datos en
internet y su vez los usuarios puede crear, accede, compartir y editar
simultáneamente, pueden crear carpetas, documentos, presentaciones, hojas de
cálculo, formularios, dibujos, etc.
Ø Herramientas para la comunicación
WhatsApp
Es
una aplicación de chat para teléfonos móviles de última generación, los
llamados smartphones. Sirve para enviar mensajes de texto y
multimedia entre sus usuarios.
¿Para qué sirve WhatsApp?
Las posibilidades de WhatsApp varían en función del teléfono o
dispositivo que tengamos. Existen modelos que aceptan una versión básica y
otros más avanzada. Hay versiones para Android, iPhone, Mac, Windows Phone y
WIndows de escritorio (versión 8 o superior, de 32 o 64 bits). La aplicación
permite, además del chat de texto, enviar fotografías, audio y vídeos. Tiene
acceso directo a las llamadas convencionales, que se cobran por el operador de
telefonía contratado, y a llamadas de WhatsApp, o incluso video llamadas, que
se transmiten por internet y pueden, o bien salir gratis si estamos conectados
a una wifi, o consumir datos.
NARRACIÓN REFLEXIVA
NARRACIÓN REFLEXIVA
Melina Perez Rodriguez
Antes de nada, quiero reflexionar sobre mi
renuencia al uso de las redes sociales principalmente el WhatsApp, lo veía como
una distracción más y que no me beneficiaba. Cómo el año pasado logré mi
nombramiento, busqué cursos de capacitación en diversas universidades los meses
de enero y febrero, y es en ese momento que me di cuenta las redes sociales no
solo pueden servir de distracción si no como un instrumento para intercambiar
información en este caso académica, y es a partir de ese momento que cedí y acepté
ser parte del siglo XXI.
Al estar cerca el inicio de clases me sentía
muy emocionada pero también con mucho temor, me sentía como un estudiante que
ingresaba a una nueva escuela, tenía tanta curiosidad de conocer a todos los
que formaban parte de la comunidad educativa, director, docentes y más que nada
a mis estudiantes.
Cuando llegó el primer día de asistir a mi
nueva institución educativa, me sentí muy feliz pero aún el miedo asomaba
dentro de mí de querer hacer bien las cosas y de hacerlo mejor, anteriormente
trabaje en un colegio particular que inicie enseñando 22 aulas y terminé
enseñando 17 aulas, con un aproximado de 510 estudiantes y cuando me comentaron
que ahora tendría 8 aulas y uno de tutoría, sentí que me sería fácil. Empecé a
conocer a toda la plana docente y me sentí muy bien; desde ese momento
comenzamos a trabajar sobre la conformación de las comisiones, elaboración de
la programación anual, unidades, sesiones y toda la documentación que se
requería para el inicio de clases y también nos organizamos para darles la
bienvenida a los estudiantes. Hasta que el 15 de marzo el presidente Martín
Vizcarra anuncia el aislamiento social obligatorio por 15 días que al final se
prolongó hasta el 30 de junio, y dejando incierto el inicio de las clases
presenciales hasta el día de hoy.
Cuando se declaró por 15 días el aislamiento
social, desde nuestras casas seguimos trabajando con la culminación de los
documentos que teníamos pendientes y sin saber aún que todo se prolongaría, al
pasar los días y aumentaban los casos de contagiados y muertos por el COVID 19,
empezamos a tomar conciencia desde el director y todos mis colegas que esto
duraría mucho tiempo, y el director empezó a organizarnos primero para
contactarnos con todos nuestros estudiantes a través de los padres,
sinceramente no tenía idea por dónde empezar ni sabía qué hacer, porque era
nueva en mi Institución educativa y no conocía a ningún padre familia.
Empezamos primero a organizarnos los docentes creando grupos de WhatsApp,
elaborar nuestra lista de estudiantes por tutoría e inicie buscando a la tutora
del año anterior de 3ro A, que antes era 2do A, quién me contacto con una de
las madres de familia, la señora Celia Chávez, aún tenía un escaso conocimiento
del uso del WhatsApp y sumado a que no conocía a ningún padre de familia, la
señora Celia me ayudo a formar el grupo de WhatsApp de los padres de familia
del 3ro A y es así que comprendí solo a través de la situación de pandemia, que
mi aliado fue el WhatsApp, que por mucho tiempo rechazaba y no lo veía con
buenos ojos.
Una vez que ya tenía contactado a mis padres de
familia faltaban los estudiantes nuevos, algunos no habían dejado sus números
de celulares cuando se matricularon, pero poco a poco se integraron casi todos.
Todos los tutores ya teníamos nuestros a respectivos grupos por WhatsApp.
El siguiente pasó era ¿Cómo vamos a dar inicio
a las clases?, en ese momento aún cabía la posibilidad de retomar las clases
presenciales, entonces en mi caso inicie con una pequeña actividad elaborar nuestros
acuerdos de convivencia, para ir conociendo a mis estudiantes de otros grados a
través del WhatsApp de tutoría, esas fueron las primeras evidencias que me
enviaron mis estudiantes. Días después se anunciaba que las clases se darían a
través de la programación Aprendo en Casa y que se prolongaría el aislamiento
social y quedaba incierta el retorno a las aulas.
Nuevamente los docentes junto al director
empezamos a organizarnos para ver el horario de los estudiantes y a través de
que medio trabajaríamos las clases virtuales, elaborar el horario para las
clases virtuales nos demoró casi dos semanas no cuadraba las horas de algunos
docentes o se cruzaban con alguna sección, apelamos a flexibilidad. El medio
por la cual daríamos las clases virtuales sería el WhatsApp, de acuerdo a la
realidad de nuestros estudiantes, la gran mayoría no contaba con computadora en
casa ni internet, algunos tenían varios hijos que compartían un solo celular,
es por ello que optamos por ese medio.
Una vez que ya teníamos los grupos de WhatsApp
por tutoría, teníamos lo horarios de los estudiantes y nuestro empezamos con
nuestras clases virtuales, el miedo se apodero de mi principalmente por mi
escaso conocimiento de ese medio y no tenía claro ¿Cómo interactuaría con mis
estudiantes?, sería la primera semana que sin conocernos físicamente
iniciaremos nuestras clases, fue complicado porque todo lo que quería decir
tenía que escribirlo, y ello me demora un poco de tiempo, hubo momentos que se
iba la señal y los estudiantes preocupados sin saber sí estaba conectada o no,
así pasé toda la primera semana de clases virtuales. Para la siguiente semana
de clases virtuales pude percatarme de otro detalle del WhatsApp, los audios,
fenomenal para mí y ello me ayudo para agilizar mis clases, pero había otros
detalles que distraían los estudiantes como los famosos emoticones o stickers,
algunos padres comentaban cuando estaba en clases con mis estudiantes o unos a
otros estudiantes se señalaban por copiar de Internet cuando pedía la opinión o
conocimiento de cierto tema o concepto, la siguiente clase iniciamos elaborando
nuestros acuerdos de convivencia virtual que incluía a los padres, las
recordamos entre tres o cuatro clases de allí todo quedo bien claro para mis
estudiantes. Poco a poco fue descubriendo como usar el WhatsApp en las clases
virtuales desde el envío de vídeos, separatas e imágenes para hacer más
dinámica mi clase virtual, me sentía contenta.
Pero lo que no me quedaba claro ¿Cómo trabajaría
la retroalimentación?, me puse a investigar y llevar cursos de capacitación
virtual para trabajar la retroalimentación remota, me ayudó mucho y lo hice ya
sea enviando audios, escribiendo a mis estudiantes o hice la retroalimentación
grupal, y me sirvió para replantear mis actividades y clases virtuales tratando
de ser mediadora y que se dé una activa
participación de los estudiantes priorizando el pensamiento crítico y reflexivo
y contextualizando.
Otra dificultad que encontré es la escasa
participación de los estudiantes en grado como el 3ro B, empecé primero
conversando en grupo con ellos, de ¿Cómo se sienten?, sus dificultades, etc.,
era un grupo que se cerraba, hasta que un día decidí hablar con cada padre de
familia y que ellos me comentaran lo que pasaba, algunos dijeron a sus padres
que yo no hacía clase, algunos que no dejaba actividades y que otros sí tenían
dificultades por el celular. Fue gratificante conversé con cada papá, buscamos
soluciones para ayudar a sus menores hijos y se comprometieron a ayudar a sus
hijos, y la siguiente clase la participación del 3ro B en las clases virtuales
fue más amena y participativa y la mayoría cumplió con el envío de sus
evidencias.
Otro de los factores importantes fue la
orientación emocional de cada estudiante y también de los padres, conversar con
ellos sobre lo que sienten ayudó mucho a que se mantuvieran la mayoría en las
clases virtuales, y el tan solo hecho de escuchar a los padres fue fundamental,
algunos se sentían impotentes de no saber ¿Qué hacer? Porque no tenían trabajo,
o tenían familiares enfermos y que algunos fallecieron, y lo único que querían
era que los escucharán para desahogarse y eso es lo que hice.
Me falta mucho por aprender y dar en estas
clases virtuales, pero de lo que sí me siento agradecida y feliz es que, a pesar
de no conocerlos físicamente, me enviaron saludos por el día de la madre y del
maestro, que eso es lo más bello y gratificante de la labor docente que lo poco
que haces pueda ser reconocido por tus estudiantes y padres, y ello hace que me
esfuerce más y me comprometa más con ellos.